El Vallés Oriental es una comarca llena de propuestas turísticas, muchas de ellas de carácter natural y paisajístico, mientras que otras se centran en experiencias de ocio como conciertos, festivales, fiestas tradicionales y, por qué no, la gastronomía local. Pero también cuenta con monumentos que, por belleza o interés histórico, son dignos de visitar. En este artículo reunimos los mejores en una lista sobre qué ver en el Vallés Oriental. ¡Ten bien preparada tu cámara y hazte con una buena guía!

Granollers hace honor a su capitalidad

Granollers, como capital del Vallés Oriental, cuenta con algunos de los monumentos y museos más destacados de la comarca, que también hemos tratado en posts anteriores sobre qué hacer en Granollers. Por ejemplo, con su emblemática Porxada, un porche renacentista (siglo XVI) de carácter único en la zona y en el resto del país. Por ello, aún hoy sigue siendo el verdadero epicentro de la ciudad. Pero la ciudad cuenta con otros muchos lugares de interés que pueden formar parte de esta selección de cosas que ver en el Vallés Oriental. Por ejemplo, L’Adoberia, que es el Centro de Interpretación Histórica de la ciudad, con especial énfasis en la Edad Media, periodo en el que este recinto funcionaba como curtiduría, como aprenderás en este yacimiento arqueológico.

Un yacimiento romano de grandísimo valor

Pero L’Adoberia no es el único yacimiento que se puede ver en el Vallés Oriental. De hecho, entre Montornés del Vallés y Montmeló se encuentra Mons Observans, un sitio arqueológico romano que se remonta al siglo II a.C. y que se ha acondicionado para recibir visitas. Su interés radica, sobre todo, en las pinturas murales que se conservan, de estilo pompeyano, valiosas por la gran escasez que de ellas hay en el resto de Europa. También en Montmeló y cambiando completamente de tercio, se encuentra el Circuit de Barcelona-Catalunya que, más allá de sus eventos deportivos, organiza visitas por sus instalaciones.

Caldes de Montbui y sus termas

En esta lista de lugares que ver en el Vallés Oriental, otro de los que tiene más solera es el recinto termal de Caldes de Montbui, también de época romana. Aunque en la actualidad existen balnearios más modernos que todavía hoy explotan las aguas subterráneas y calientes que brotan del subsuelo, sus termas romanas son de visita obligatoria para conocer este importante ritual social de hace veinte siglos. También es interesante la Fuente del León, situada en la plaza de la villa y con orígenes en el siglo XVI: aún hoy emana agua a 74 ºC por su boca. En este municipio también te recomendamos ver el Museo Manolo Hugué, con obras de Picasso.

Sant Miquel del Fai, un lugar lleno de encanto

Para muchos, el lugar con mayor encanto de todo el Vallés Oriental, en el término municipal de Riells. Se trata de un monasterio benedictino encajonado en la hoz del río Tenes. Su origen se remonta al siglo X y cuenta con espacios arquitectónicos románicos y góticos, como la iglesia, sus capillas laterales y la casa del priorato. Además, contribuye a su espectacularidad el gran salto de agua que surge en este despeñadero, así como sus cuevas naturales. La Diputación de Barcelona lo adquirió recientemente para rehabilitarlo y convertirlo en un espacio público.

El Menhir de Mollet, un monolito que impresiona

Otra de las cosas que ver en el Vallés Oriental es, sin duda, el Menhir de Mollet. Aunque su descubrimiento fue reciente, en 2009, su historia se remonta mucho más atrás: ¡hace más de 4.000 años! Se trata de un gran monolito, de 4,90 metros de altura y 68 cm de anchura, con un peso cercano a las 6 toneladas. Lo que lo convierte en una pieza única de nuestra historia son sus relieves antropomorfos, hecho que ha llevado a los expertos a llamarlo estatua-menhir. Se puede contemplar actualmente en el Pla de les Pruneres y se organizan charlas explicativas frente a él de forma periódica.

Sant Celoni, una bonita sorpresa

Una de las propuestas sobre qué ver en el Vallés Oriental es Sant Celoni, y en concreto su iglesia de Sant Martí: se trata de un espectacular templo del siglo XVIII, recientemente restaurado, lo que ha servido para poner en valor su fantástico esgrafiado barroco. Una obra única por su originalidad y su calidad.

Otros lugares que ver en el Vallés Oriental

Y si ya conoces todos estos sitios y buscas otras propuestas que valgan la pena, aquí van otras:

• Torrassa del Moro: en Llinars del Vallés, una atalaya de origen romano y estructura medieval, con magníficas vistas del entorno
• El Figueró i Montmany, con restos medievales e iglesias románicas
• La Garriga, uno de los pueblos más bonitos cerca de Barcelona
• El Montseny, con su parque natural declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO en 1978

Y si además de preguntarte qué ver en el Vallés Oriental también quieres saber dónde alojarte para visitar estos lugares, la respuesta es sencilla: el Hotel Augusta Barcelona Vallés, por cercanía, variedad de servicios, calidad en la atención y amplitud de las instalaciones.

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